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Praderas de huertos: Una mirada al pasado y dos al futuro

Naturefund se ocupa de los huertos de los alrededores de Wiesbaden desde 2015. Hay que salvar un gran número de árboles viejos de la decadencia y, por tanto, también de su eventual desaparición. 

Han pasado muchas cosas

Desde el inicio de los trabajos, Naturefund ha asegurado en sus existencias alrededor de un tercio de los 40.000 árboles de los alrededores de Wiesbaden, los ha conservado mediante cuidados, ha determinado su especie y ha organizado su replantación. El equipo de exteriores no sólo se ocupa de sus propias zonas o de las zonas alquiladas, sino también, a petición y en colaboración, de las zonas adyacentes de otros propietarios. Estas cooperaciones han ido incluso más allá de los periodos de cosecha y mantenimiento, que requieren mucha mano de obra, y han conseguido la certificación ecológica (DE-ÖKO-006) de zonas separadas.

Es necesario un cuidado versátil

Ya desde 2018, la Lotería Postal Alemana nos ha apoyado con donaciones esporádicas. Pero también los 824 patrocinadores privados de nuestro último proyecto de donación hicieron posible que el cuidado y la preservación de las praderas de los huertos sea nuestra principal competencia desde hace tiempo. En 2019, Naturefund se involucró en la creación de redes locales para la preservación de los huertos: Se creó una "mesa redonda" que reunió a propietarios, agricultores, partes interesadas y representantes de la ciudad de Wiesbaden en torno a la mesa y en debates constructivos. Para ello, nuestro experto en huertos Martin Unfricht y todo nuestro equipo de exteriores trabajan en los huertos durante todo el año, ya que el trabajo de mantenimiento es tan complejo como variado.

Las tareas constantes siguen siendo elaboradas hasta el día de hoy

Para evitar que las zonas se vuelvan boscosas o se llenen de arbustos, hay que segarlas o pastarlas. Los nichos ecológicos importantes para las plantas y los animales no pueden conservarse sin el espacio variado del juego sol-sombra de este biotopo. Todos los años, el equipo de Naturefund persigue el muérdago con una bruja, una plataforma elevadora y un arma afilada, e intenta contener la fuerte infestación en muchos árboles.

En muchos lugares, los viejos árboles frutales ya han alcanzado su edad objetivo. Los frutales de estas generaciones suelen vivir sólo unos 100 años. Muchas de estas variedades frutales tuvieron que ser identificadas por expertos para poder realizar nuevas plantaciones de forma selectiva. Por ello, identificamos las antiguas variedades de fruta amenazadas de desaparición y las injertamos para realizar nuevas plantaciones. Y seguimos, porque si no se replantan ahora nuevas generaciones de especies resistentes al clima, los huertos seguirán desapareciendo en pocos años.

Seguimos

Así que seguimos adelante: cuidando, podando, segando, cosechando, identificando especies y replantando. Así que todavía tenemos una gran tarea por delante. Para poder hacer frente a esta tarea en el futuro, seguimos necesitando el apoyo de las donaciones. Queremos proteger aún más árboles y su hábitat de protección de especies, para lo cual hemos lanzado un nuevo proyecto de donación. Con su ayuda, podremos seguir trabajando activamente.