· Nelly Paz, Asociación Patuca

Un nuevo recorrido

Naturefund y la Asociación Patuca intentan de proteger áreas boscosas en el parque nacional de Patuca junto con las comunidades. Nelly Paz de la Asociación cuenta de un viaje en el parque.

Al principio de un viaje

Mientras doblaba mi hamaca para guardarla dentro de mi maleta, me preguntaba a mí misma, si el caudal del río era el adecuado para empezar ya con las giras dificultosas por el parque. Mi hijo se acercó a mí a darme un fuerte abrazo y a desearme un feliz viaje; no era una gira de tiempo prolongado pero sé que a mi muchachito yo siempre le hago falta. Salí muy temprano de Tegucigalpa, mis compañeros de Catacamas ya se habían adelantado para llevar el motor y el combustible hasta el muelle. En cuanto llegué a Palestina, comimos algo rápido y nos dispusimos a abordar el pipante.

La fuerza del sol

Ya era mediodía cuando emprendimos el viaje, sentíamos que el Sol se había empecinado en quemarnos la piel, y hacernos sudar hasta la última gota de agua que teníamos en el cuerpo, el clima estaba muy caliente para ser invierno aún. No había forma de taparse de él, nos arrojamos toallas mojadas en la cabeza para evitar la insolación. Afortunadamente llegamos a un extremo de la micro-cuenca de Cigüidá donde aún hay una franja montañosa que resguarda el río, y finalmente llegamos a la casa de Nayito en donde doña Suyapa, su esposa nos regaló una taza de café y un pan que recién había horneado. Estábamos largo de nuestro destino, bajamos luego al río, abordamos y seguimos. En menos de media hora llegamos a la casa Estrella, Leonardo el líder de la comunidad de Nueva Comayagua ya nos esperaba con unas bestias.

La idea: Las comunidades son actores en el proyecto

Proseguimos a montar lo más rápido posible, teníamos aún un camino de tres horas por recorrer y la luz del día ya se estaba ocultando. Durante el viaje aproveché en comentarle a Leonardo las ideas del proyecto que tenemos con Naturefund, y cómo las comunidades podrán ser actores directos en su ejecución. Leonardo me manifestó su agrado por saber que al fin serían consideradas sus ideas, para que de esa manera los beneficios llegasen a sentirse apropiados por los comunitarios.

Una noche fria

Llegamos pasados de las 7 de la noche, ya la mayor parte de la comunidad estaba descansando. Comimos y bebimos algo ligero, Dania me acompañó a una quebrada para bañarnos y así refrescarnos un poco después de un día tan agotador. Después nos fuimos a acostar, sin embargo, como a eso de las 3 de la mañana, escuché el murmullo de Dania que no podía dormir, el frío era tremendo, las cuatro personas que nos quedamos a dormir, colgando nuestras hamacas en el corredor de la casa de Leonardo no pudimos volver a conciliar el sueño.

Àreas boscosas bajo la protección de las comunidades

Al día siguiente, aún con algo de frío, nos tomamos nuestra taza de café. La gente invitada a la reunión ya estaba llegando a la escuela, proseguimos a darles un saludo. Cuando al fin hubo la convocatoria esperada, agradecí a los presentes por estar puntualmente a la reunión. Con una pequeña oración hecha por uno de los niños de la escuela, comenzamos la reunión conociéndonos un poco, era la segunda vez que yo visitaba la comunidad, algunos aspectos ya habían cambiado un poco. Para no cansar a la gente, traté de resumir un poco de lo que se trataría el proyecto, empezando con la idea de tener áreas boscosas bajo la protección de las comunidades, cómo se trabajaría para lograr que los habitantes a través de premiaciones fuesen quienes propusiesen la forma de trabajo y continuidad a las tareas de protección. También los niños tuvieron participación al hacer consultas referentes a cómo ellos apoyarían a preservar el área, varios tuvieron ideas como elaborar pequeños rótulos alusivos a proteger la fauna, a la no quema, a cuidar de las fuentes de agua y de otros.

La gente adoptó el proyecto

Me quedé muy satisfecha con la forma en que la gente adoptó el proyecto, estaban encantados de participar en su diseño. Cerramos la reunión, los logros y las metas propuestas fueron alcanzadas, sentí que la gente estaba muy entusiasmada con las ideas del proyecto. Ahora teníamos que hacer el mismo recorrido de regreso hacia el río, nos dirigíamos a las comunidades de El Tigre y La Palosa, en donde esperábamos tener las mismas satisfacciones que tuvimos en Nueva Comayagua. Cuando íbamos por el río, a mi mente se me venía el pensamiento, que siendo las comunidades las principales diseñadoras de sus proyectos sería más fácil que las actividades se desarrollaran en el tiempo propuesto por el proyecto, y que al final dentro del Parque Nacional Patuca, tendremos una experiencia desde las comunidades que podremos socializar a nivel de los países. Más sobre el proyecto en el parque nacional de Patuca

Proteger la naturaleza

¡Apoya a Naturefund y protege la naturaleza!

Back to overview

Next news